¡Internacionalizar una empresa! En este artículo haremos una breve alusión al mundo de la internacionalización de una empresa, proceso largo y complejo en el que debemos estar acompañados de los mejores profesionales del sector.

¡Veamos qué entraña esta materia!

Primero, veamos qué implica exactamente el proceso de internacionalización. La internacionalización de la empresa es el proceso por el cual una organización crea las condiciones necesarias para operar en un mercado internacional. De hecho, cada vez son más las empresas que tienden a trasladar sus estrategias al exterior.

La internacionalización es más que expandir el negocio de los mercados locales a los extranjeros. Llevar un producto al extranjero no es algo que deba tomarse a la ligera o subestimarse. De hecho, la internacionalización es un proceso que requiere creencia, compromiso y fuerza de voluntad.

En los últimos años, la crisis económica ha reforzado la apuesta por el comercio internacional, lo que ha llevado a las empresas, especialmente a las pequeñas y medianas empresas, a buscar una salida a su ya colapsado mercado interior. La decisión de internacionalizarse es una de esas estrategias que tiene un gran impacto en cualquier marca, así como en todas las operaciones internas y externas y su gestión. En medio de la creciente tendencia exportadora, los empresarios han visto que este es un camino de crecimiento que les abre puertas. En este sentido, es interesante analizar por qué exportar es una buena opción.

Los beneficios de la internacionalización de una empresa son muy variados, pudiendo destacar los siguientes:

1. Aumento de ingresos y ventas.
2. Aparición de nuevas posibilidades.
3. Aumento y fidelización de clientes.
4. Implementación de mejoras en prevención de riesgos laborales y de otra índole, por lo que se mejora la gestión de los recursos.
5. Convertirse en la competencia del resto de las empresas y posicionamiento.
6. Ahorro de gastos.
7. Inversión en I+D+i.

Conoce algunos de los requisitos más relevantes que permitirán internacionalizar tu empresa:

1. Identifica las barreras realizando un análisis interno.
2. Conoce el producto o servicio que se va a ofrecer en la empresa a nivel internacional.
3. Examina la competencia para poder posicionarte en el mercado en el que pretendas desarrollarte.
4. Elabora una guía o estudio en donde se integren algunos datos relevantes como la estrategia a seguir.
5. Ten en cuenta la inversión que debes realizar por cada área que pretendas internacionalizar.

Además, es importante tener en cuenta que los aspectos legales afectan a cualquier empresa que decide internacionalizarse.

1. Qué normas me afectan. 
2. Cuáles son los medios de cobro en las transacciones a nivel internacional.
3. Cómo me afecta el Derecho Arancelario y la fiscalidad del país al que pretendo expandirme.
4. Crea tu networking acudiendo a eventos y encuentros.

Adicionalmente, cualquier empresa que decida exportar debe haber desarrollado previamente una estrategia que la compañía siga. Algunos de los retos que habitualmente deben superar las empresas que pretenden internacionalizarse son:

1. Optimización de la empresa.
2. Saber si la empresa es estacional y cómo compensarlo.

Ateniendo a los datos anteriormente mencionados, ahora corresponde hacer una breve alusión a las fases para internacionalizar una empresa:

1. Crear un departamento de exportación.
2. Realizar un análisis interno.
3. Apostar por la innovación, conoce la importancia del I+D+i.
4. Elegir los mercados, ¿dónde nos vamos a internacionalizar?
5. Buscar un canal de comercialización.
6. Empezar con la promoción, apostar por la comunicación y el marketing.
7. Conviértete en una empresa mediana y gran internacional.

Artículos propios recientes:

• El impacto económico del sector ecuestre en España.
• El transporte equino.
• Patrocinio ecuestre.

Referencias externas: 

• RRYP.
• TVITEC.